Impacto lateral: ¿a favor o a contramarcha?

¿Tiene alguna influencia la orientación de una silla auto en caso de impacto lateral? ¿Existe alguna diferencia en este tipo de impacto entre una silla de cara a la marcha y otra de espaldas?

Para responder esta pregunta Britax ha llevado a cabo distintos ensayos recientemente siguiendo los protocolos publicados por el ADAC y la normativa ECE R129, y analizando los siguientes parámetros:

a) Desplazamiento de la cabeza




De cara a la marcha: Como consecuencia del impacto, la cabeza del ocupante sufre un desplazamiento en dos direcciones: Primero transversal hasta llegar a la esquina, momento en que la cabeza experimenta un giro para continuar su desplazamiento hacia delante sobre la superficie de la aleta lateral de la silla.
Este movimiento compuesto contribuye a distribuir la deceleración en distintas direcciones en lugar de concentrar la descarga de energía en un solo punto.




De espaldas a la marcha: La cabeza se desplaza hacia la esquina, donde queda retenida. No hay posibilidad de rotación ni de más desplazamiento con lo que la totalidad de descarga de energía se efectúa en en sólo punto y en una sola dirección.


b) Momento de torsión entre la cabeza y el cuello



A partir del instante en que los hombros toman contacto con el lateral de la sillita, el desplazamiento subsiguiente de la cabeza imprime un momento de torsión proporcional al espacio libre que queda hasta el cabezal.

La orientación de la sillita no afecta el resultado si la dirección de impacto es completamente perpendicular al eje longitudinal del automóvil (protocolo ECE R129)

No obstante, un impacto fronto-lateral a 10º de la perpendicular (protocolo del ADAC) provoca un desplazamiento hacia delante del ocupante en una silla de cara a la marcha que reduce el impacto del hombro contra la aleta, reduciendo la torsión del cuello antes de impactar con el cabezal.

El mismo test a 10º con una silla a contramarcha muestra como el cuerpo queda retenido en la esquina cuando el espacio hasta el cabezal es el máximo disponible, lo que provoca un momento de torsión más acusado del cuello.

Por supuesto el resultado sería inverso si el ángulo de impacto fuera negativo (-10º), siendo entonces la silla a contramarcha la que llevaría ventaja.


c) Desplazamiento del centro de gravedad



Ante un impacto lateral, una silla auto experimenta una rotación que desarrolla un brazo de palanca proporcional al peso del ocupante y a la distancia del centro de gravedad a los conectores Isofix

Una silla de cara a la marcha presenta el centro de gravedad muy cerca de ese centro de rotación.

Una silla a contramarcha, en cambio, presenta el centro de gravedad en el otro extremo, resultando en un mayor brazo de palanca que provoca un impacto de la cabeza a mayor velocidad y una descarga más alta de energía al contacto con la puerta.

En la silla de cara, la ubicación relativa del eje de giro hace que la primera área de contacto sea la de los pies, mientras que a contramarcha la primera toma de contacto con la puerta es la de la cabeza.


Conclusiones

Las sillas de cara a la marcha ofrecen cierta protección adicional ante un impacto lateral, en especial cuanto mayor es el peso del ocupante.

Dicho esto, no deberíamos utilizar esta orientación antes de los 15 meses por lo menos, pues la orientación a contramarcha nos protege mucho mejor del impacto frontal a edades tempranas, mientras se va desarrollando la musculatura que sustenta las vértebras cervicales.